Para evitar que se convierta en una epidemia de grandes dimensiones, el grupo parlamentario del Partido Verde en la Cámara de Diputados, presentó una reforma a la fracción VI del artículo 134 de la Ley General de Salud, para incluir a la fiebre de Chikungunya dentro de las actividades de vigilancia epidemiológica, de prevención y control de la Secretaria de Salud Federal y los gobiernos de las entidades federativas.

El diputado federal por Chiapas, Diego Valera Fuentes reconoció que existe una expansión descontrolada en el continente americano de esta enfermedad, que es propagada por los mosquitos del dengue, y sus primeros brotes se dieron hace un año en el Caribe.

“Desafortunadamente, la propagación de esta epidemia no muestra un comportamiento diferente al experimentado en el Caribe, y continua su expansión a lo largo y ancho de nuestro país; con brotes importantes, principalmente en Guerrero, Oaxaca y Chiapas, por lo cual las autoridades de Salud -tanto a nivel federal como estatal- y el Poder Legislativo debemos tomar cartas en el asunto”, destacó el legislador ecologista.

De acuerdo con la información de la Secretaria de Salud el número de casos pasó de 86 en enero a 3 mil 968 en julio del presente año, y las entidades con mayor afectación son Guerrero con mil 246 casos registrados en los últimos siete meses; Oaxaca con 726 enfermos y Chiapas con 576.

Sin embargo, Valera Fuentes reconoció que las cifras oficiales pueden estar alejadas de la realidad, ya que muchas de las personas infectadas con el virus no acuden al médico, por lo tanto no aparecen en los registros epidemiológicos.

“Hago un llamado que trascienda no solamente las paredes de este palacio legislativo, sino que haga eco también en la Secretaría de Salud Federal, para que redoble sus esfuerzos y actúe de manera aún más decidida en la atención de este problema. De tal modo que resuene hasta los estados de la República, para que sus gobernadores incorporen en sus agendas de manera inmediata campañas de información, de control y de prevención de este mal”.

Asimismo, instó a la sociedad civil a participar de manera corresponsable en las tareas de prevención de la fiebre chikungunya: “En cada municipio, cada familia de este país debe asumir la responsabilidad de mantener limpios sus espacios, sus hogares y sus terrenos, de tal manera que se minimicen las condiciones de reproducción del mosquito transmisor”.

Además, recordó que aun cuando la enfermedad no es mortal, quienes la padecen sufren de intensos dolores que pueden controlarse con un tratamiento paliativo toda vez que no hay una cura o vacuna para erradicarla y las secuelas pueden durar semanas o años.

PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO