La Cámara de Diputados aprobó una reforma legal, a propuesta del Partido Verde, para que los gobiernos inviertan en movilidad urbana.  

A iniciativa del Partido Verde, la Cámara de Diputados aprobó una reforma en materia de movilidad, para otorgar transporte público gratuito y universal a las personas con discapacidad.

"El cambio legal busca brindar una tarjeta que les permita utilizar el transporte público de manera gratuita, ello, ayudará a ejercer su derecho a la movilidad urbana y a tener acceso a la educación, salud, justicia y trabajo, que son asignaturas pendientes en nuestro país" explicó la autora de la iniciativa la diputada ecologista, Janine Patricia Quijano Tapia.

La adición al Artículo 20 Bis de la Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad establece que, el gobierno en sus tres niveles, federal, estatal y municipal, en el ámbito de sus respectivas competencias, promoverá el diseño y la aplicación de acciones y programas de acceso gratuito y universal al servicio de transporte público.

Con base en el Censo de Población y Vivienda de 2020, en México, existen más de seis millones de habitantes en condición de discapacidad, de ahí, la importancia de incluir el término de "permanencia" en el concepto de accesibilidad, que se encuentra definido en la ley en cuestión.

Quijano Tapia celebró que el pleno legislativo, por unanimidad de votos, 489 a favor, aprobara el dictamen emitido por la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, con ello, dijo, abonamos a la construcción de una sociedad más inclusiva, con la adopción de medidas que fomentan la accesibilidad de las personas con discapacidad al transporte masivo, al entorno físico y a los espacios de uso público.

"Buscamos cimentar espacios que hagan menos difícil y más cómoda la estancia de las personas con discapacidad. Pensemos, por ejemplo, en una oficina de gobierno al que una persona en esta condición acude a realizar un trámite, de acuerdo a la ley vigente, el inmueble tiene que adecuarse para permitir el acceso a la misma, puede ser a través de una rampa, pero no existe la obligación de contar con un espacio de espera adecuado" reflexionó. 

"Poco a poco la sociedad ha hecho conciencia que debemos crear ciudades accesibles, donde nadie se quede atrás, sin embargo, siguen los obstáculos a la movilidad en los conjuntos arquitectónicos y el espacio público, reflejados en carencias de equipamiento urbano, errores en el diseño, medidas mal aplicadas o falta de cultura" insistió.