Muy buenos días a todos.

Agradezco al Grupo Parlamentario Conservacionista Mexicano su invitación a participar en esta ceremonia de inauguración.

Saludo con respeto a los integrantes de este Grupo Parlamentario; a la Senadora Marcela Guerra y a los representantes de las Empresas y Organizaciones Gubernamentales aquí presentes.

Gracias a la suma de este tipo de esfuerzos el desarrollo sustentable está siendo incluido en las agendas gubernamentales y sobre todo en las estrategias de negocios de los sectores productivos y empresariales.

Temas como el cambio climático, la contaminación del aire, agua y suelo, la pérdida de hábitats, de las especies y la sobreexplotación de los recursos naturales, entre otros, pasaron de ser una idea abstracta, a un compromiso moral y ahora a una responsabilidad legislativa muy clara y definida.

Hoy en día asegurar la sustentabilidad es tan importante como asegurar el desarrollo y el crecimiento económico.

Como parlamentarios, nos corresponde legislar, no en cantidad pero si con calidad: asegurando la aplicación y el cumplimiento de la legislación ambiental.

No se trata necesariamente de que hagamos más leyes, sino de hacer leyes más eficaces, más puntuales y de fortalecer la efectividad de las que ya existen.

Es por lo anterior que considero que la Comisión que tengo el honor de Presidir cuenta con un Plan de Trabajo que permite:

• Fortalecer el marco jurídico para proteger y conservar efectivamente la biodiversidad y los servicios ambientales que presta nuestra geografía.

• Transitar a un régimen eficaz, adecuado y moderno para la calidad del aire y la protección atmosférica, un tema sumamente relevante no sólo en el Valle de México, sino en la Megalópolis.

• Consolidar un sistema eficaz de prevención y de gestión integral de los residuos en los ámbitos federal, estatal y municipal.

• Lograr la efectividad y eficiencia de los instrumentos marco de la política ambiental como el Ordenamiento Ecológico y la Evaluación del Impacto Ambiental.

• E instrumentar la Reforma Constitucional sobre el derecho de toda persona al acceso, disposición y saneamiento de agua suficiente, salubre, aceptable y asequible, con base en estándares y las mejores prácticas internacionales sobre Derechos Humanos.

Nuestro Plan, es producto de una estrecha y fructífera colaboración con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, del gobierno de la República, la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales, y con el acompañamiento de la OEA y el Banco Mundial.

Es una visión compartida, que no admite improvisaciones, orientada al cumplimiento del derecho ambiental y consecuente con los compromisos internacionales adquiridos por un México que sigue enfrentando grandes desafíos para el cumplimiento y aplicación de sus leyes.

A veces nos hemos encontrado con este tipo de situaciones en donde México adquiere cierto tipo de compromisos internacionales que luego parece difícil ejercer en el cumplimiento del día a día. Tenemos que ser muy puntuales en que México sí puede estar a la altura de lo que ya comprometió y que puede seguir avanzando con la legislación local.

Por eso también, los esfuerzos de esta visión compartida están enfocados a atender los vacíos legales, las duplicidades y las contradicciones de nuestra legislación en materia ambiental.

Y creo que lo logra al garantizar su eficaz aplicación, en favor de la protección de nuestra riqueza natural y del bienestar de todos los mexicanos, en ejercicio de su derecho a un ambiente sano.

Sin duda, la agenda que se propone es ambiciosa; tan ambiciosa como realista porque responde a la necesidad de proteger los ecosistemas, conservar la biodiversidad, los recursos naturales, la salud humana y la calidad de vida de los mexicanos.

Hemos tomado consciencia de la urgencia de contar con un marco legal que permita gestionar, de manera integral, la calidad del aire en las ciudades y en las zonas metropolitanas del país.

Desde el 2013 presentamos la Iniciativa de Ley General de Calidad del Aire y Protección a la Atmosfera, misma que fue votada por unanimidad por este Senado, pero sigue en espera de ser votada en la colegisladora.

También consideramos necesario que se presenten medidas que apoyen la implantación de esta Ley y su fortalecimiento.

Tan importante como impulsar acciones de movilidad y desarrollo urbano que tengan impacto en la calidad del aire.

Hay que entender que el problema no se limita al sector transporte; también a la distribución de los asentamientos humanos y a la falta de una planeación urbana enfocada a la movilidad sustentable.

Y por supuesto que no estamos dejando a un lado el mayor reto: el cambio climático.

Hoy en día, no tomar en cuenta las implicaciones que el cambio climático tiene en la vida de las personas, es poner en riesgo y en peligro la seguridad de los ciudadanos.

México es un país privilegiado que cuenta con el 10 por ciento de la riqueza biológica global, pero también somos uno de los países más vulnerables a los impactos negativos del cambio climático.

Y a pesar de nuestra riqueza biológica y de ser un país que goza de una gran apertura económica y comercial, seguimos dependiendo de una sola fuente de energía. Necesitamos replantear como está configurada nuestra matriz energética.

Con estos y otros desafíos aun existentes en nuestro país, esperamos que estas propuestas e iniciativas contribuyan a mejorar y fortalecer la eficiencia y la eficacia de la legislación sobre medio ambiente y recursos naturales en México.

Como toda tarea legislativa, siempre será una tarea inconclusa que habrá de enfrentar nuevos retos no sólo ambientales, sino políticos y legislativos, seguramente nuevas oposiciones, pero sin duda lograremos un consenso.

De ahí que este Plan de Trabajo tenga la particularidad de poder ser revisado y evaluado periódicamente para su eficaz aplicación y cumplimiento.

Este plan lo estaremos compartiendo con la creación, a finales de este mes, de una Red Interparlamentaria de presidentes de comisiones de Medio Ambiente, en donde podamos hacer intercambio de este tipo de prácticas, que se sumen a los instrumentos ya disponibles, así como a las medidas con las que nos están apoyando el Banco Mundial.

Creemos que México puede ser punta de lanza en este tipo de iniciativas. Por eso también, para esta Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales es muy importante la suma de más y mejores aliados a este esfuerzo de colaboración entre el poder ejecutivo, el legislativo, el judicial y la sociedad civil.

Y en este sentido, agradezco al Grupo Parlamentario Conservacionista Mexicano su disposición para fortalecer las instituciones de conservación, equilibrio y desarrollo, promoviendo mejores prácticas para garantizar una ecología integral.